sábado, 12 de enero de 2008

Resumenes sobre conversaciones de Yoga de TKV Desikachar 8

Debemos considerar otros dos aspectos en la práctica de yoga. Pri­mero, yoga nos enseña que en cada acción hay efectos positivos y ne­gativos. Os hablo y es una acción positiva ya que me ayuda a comuni­carme. Después de dos horas de hablar, tengo la garganta cansada. Esto es el aspecto negativo. Todo lo que hacemos en la vida puede te­ner efectos positivos y negativos. Por esto es importante poner aten­ción en nuestras acciones. Debemos reconocer qué efectos son positi­vos y cuales negativos, para luego poner más atención a los primeros y neutralizar los segundos. En todos los detalles de asana debemos seguir este principio. Por ejemplo, alguien dice que no puede pasar un día sin hacer la posición sobre la cabeza. Es lo primero que hacen al levantarse durante diez minutos o antes de acostarse por la noche. Sienten una agradable sensación de bienestar. No la preparan, única­mente se colocan sobre la cabeza. Lo que no consideran es el aspecto negativo de la postura. Aunque esta postura es generalmente buena, porque invierte los habituales efectos de la gravedad en el cuerpo, coloca todo el peso del cuerpo en el cuello. Nuestro cuello corto, creado para llevar sólo el peso de la cabeza, debe aguantar ahora todo el cuerpo.
Así, pues, después de la posición sobre la cabeza, debemos neutralizar este aspecto negativo haciendo una contra postura. Si no lo ha­cemos, el cuello se pondrá rígido. En poco tiempo podemos sentir entumecimiento en los dedos a causa de la compresión de los nervios de las vértebras.
El segundo aspecto también importante es el de la preparación.
Antes de hacer una postura debemos estar seguros de que el cuerpo está preparado para ello. Si lo primero que hacemos por la mañana es sentamos con las piernas cruzadas y no hemos observado el cuerpo o preparado las piernas, puede que nos duelan las rodillas. Si lo pre­paramos bien, no necesitamos tanto la contra postura. Pero la contra postura se necesita en algunas posturas como la invertida sobre la cabeza, sobre la espalda, flexiones y torsiones. Más tarde trataré de la preparación y contra postura en detalle. ¿Hay algunas preguntas sobre asana, la técnica de respiración, cómo coordinar res­piración y movimiento, la retención de la respiración y la preparación de una sesión de asanas?
Pregunta: He practicado ejercicios en otra disciplina y me he con­centrado en el centro de mi cuerpo, en el área del diafragma. ¿Puede uno concentrarse también sobre una zona especial del cuerpo, por ejemplo la frente o la garganta? Y en este caso, ¿es allí donde se centra toda la atención?
Respuesta: La atención debe estar donde está la máxima acción, ya que entonces la acción será mucho más profunda. Cuando inspira­mos, por ejemplo, la acción se mueve desde el pecho hacia el ombli­go; cuando espiramos la acción está centrada en el abdomen. También hay un movimiento secundario de la inspiración, cuando la parte baja del abdomen se levanta. En consecuencia, cuando inspira­mos, la atención está en el pecho y el diafragma, y cuando espiramos la atención está en el abdomen. Esto, pues, es una forma de medita­ción si estamos completamente absortos en la acción y nada más. Es la misma atención a la acción de que hemos hablado antes. Una persona que haya practicado esto, puede centrar su atención sobre cualquier zona de actividad.